La mantequilla de ajo chilote es una deliciosa variante de la mantequilla tradicional que destaca por su sabor intenso y aromático. Ideal para untar sobre pan caliente y preparar irresistibles panes con ajo, también es perfecta para acompañar papas, vegetales asados, carnes o pastas. Su textura cremosa y su perfil de sabor único convierten cualquier plato en una experiencia gourmet. Además, puede usarse para saltear ingredientes y realzar el gusto de tus preparaciones cotidianas con un toque sofisticado y natural. Una forma sencilla y deliciosa de elevar tus comidas.

 Ingredientes:

  • 4 dientes de ajo chilote
  • 250 g de mantequilla sin sal (Para poder controlar la cantidad de sal que le deseo agregar)
  • 1/4 de tasa de aceite de oliva extra virgen
  • Sal a gusto
  • Perejil fresco picado ( 2 cucharadas de perejil seco reemplazarán 1/4 de taza de perejil fresco.)

Preparación:

  1. Comienza seleccionando ajos chilotes de CampOrgánico, reconocidos por su tamaño y sabor únicos. Retira con cuidado el exceso de cáscara y corta la punta superior de la cabeza del ajo. luego coloca los ajos sobre una budinera y añade aceite de oliva generosamente. pincela suavemente las puntas con aceite de oliva extra virgen y agrega un toque de sal . Hornea a 180 °C durante 25 minutos, hasta que estén tiernos y levemente caramelizados. 

 

                                                                                                 

2. Una vez que los ajos estén listos, retíralos del horno y déjalos enfriar unos minutos. Luego, pélalos y machácalos hasta obtener un puré. En un bowl o fuente, mezcla la mantequilla a temperatura ambiente con el puré de ajo, añade sal a gusto y, por último, incorpora el perejil fresco bien picado.

 

                                               

4. Revuelve todo hasta que quede una mezcla homogénea. Luego, coloca la mantequilla sobre un trozo de papel film, distribuyéndola a lo largo para formar un rollo. Envuelve bien con el film, dándole forma cilíndrica y compacta.Una vez listo, lleva el rollo de mantequilla al refrigerador para que tome consistencia.

                                               

                                                  

5. Una vez que la mantequilla esté bien refrigerada y firme, estará lista para cortar en porciones.
Puedes disfrutarla sobre un pan tostado recién hecho o incorporarla en preparaciones como carnes, pescados, verduras asadas o salsas, realzando el sabor de cada plato con su toque único.

                   

 

6. Guarda la mantequilla en el refrigerador si la vas a consumir dentro de los próximos 7 a 10 días. Si no la vas a usar pronto, congélala. Se conserva hasta por 3 meses. Para usarla, solo corta una porción y vuelve a guardar el resto.